Las razones de la oposición
Por Andrés González Arias
En las entidades federativas se tienen dos instancias en las que, por su encomienda –ambas son representativas del pueblo– la materia prima con la que trabajan es la política, interpretada esta como el servicio al ciudadano.
Y nada más.
Se tuerce esta cuando se sirve más al partido que lo postuló, que a la gente.
Estas son –sin mucha vuelta de hoja– el Legislativo, pero también los Ayuntamientos.
En Querétaro y en el cierre de este mes –mes de informes al fin– se dejan ver el fondo de los cargos; se exhiben capacidades y son ventanas transparentes por las que se pueden ver los oficios. Como servidores públicos, claro.
Así en el Ayuntamiento de Querétaro, el municipio más poblado de la entidad y que es llamado con razón “La joya de la corona”.
En las intervenciones de los regidores en la Sesión Solemne de este, se dieron niveles.
Llamó mucho la atención la del regidor priista Marco Álvarez Malo, que se salió del término “complaciente” para entrar en los terrenos del análisis serio, razonado y de compromiso con el ciudadano.
Y tocó las fibras sensibles como el de la seguridad ciudadana, calificándola como “una tarea incompleta”; la del transporte citadino –“la movilidad no está funcionando”– en un lenguaje que, por realista, reclamó atención y que el gobierno municipal se aplique.
Pero Marco Álvarez fue particularmente exigente –sin ser hiriente– cuando abordó el delicado tema de la defensa de la mujer. “Las mujeres viven con miedo y eso nunca debe ser lo normal, porque lo normal es vivir bien, vivir seguras y seguros. Requerimos fortalecer de forma permanente a nuestras instituciones para mantener bien fraguado nuestro Estado de Derecho”.
Dice que en esta materia –la de seguridad– “nunca se podrá considerar totalmente una tarea acabada, pero es prioridad seguir haciendo todos los esfuerzos posibles sin escatimar, para que en Querétaro podamos seguir viviendo en paz”.
Marco Álvarez es un ente político, político; poseedor de una fina mano izquierda. Aplica en su cargo como regidor el principio del pragmatismo político, pero en donde los intereses primarios son los del ciudadano.
En el Ayuntamiento, hace grupo con su compañera María Alemán, ambos priistas, priistas.
“El grupo del Partido Revolucionario Institucional refrenda hoy el compromiso asumido al llegar a este espacio de representación. Se suma a las acciones que buscan cumplir y hacer cumplir los derechos de las y los ciudadanos y garantizar un gobierno que ejerza una política de justicia social efectiva”.
Pero distinguió cuando hizo un llamado claro:
“Es a cerrar filas e impedir el avance de la intolerancia, el autoritarismo, la descalificación provocados por liderazgos que solo dividen. En política, como en cualquier otro ámbito humano, nadie tiene la visión completa; todos debemos sumar acorde a las causas que nos tienen hoy aquí y estas son las de las y los ciudadanos”.
Sus palabras pues, con clara dedicatoria.
Y cierra así:
“En el PRI, estamos convencidos que, escuchando más, nos equivocamos menos y el resultado serán mejores gobiernos”.
Les digo. La política al servicio del ciudadano.
Ni que.
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