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El crecimiento del ITQ

Las ideas expresadas en las columnas, así como en otros artículos de opinión, no necesariamente corresponden a la línea editorial de Radar del Centro, y solo son responsabilidad del autor.

Todo cambio incomoda o, por lo menos, desequilibra un estado al que ya se está impuesto.

Sucede que el Instituto Tecnológico de Querétaro, ITQ acaba de abrir el Campus Norte –una extensión del tradicional edificio del Cerro de las Campanas– y está disponiendo que los alumnos de la carrera de Ingeniería en Gestión Empresarial se trasladen hacia este nuevo lugar, en donde, además, ya se tienen dos carreras, Arquitectura e Ingeniería Mecatrónica.

Desde el primer momento de que fue dada a conocer esta disposición de traslado, tanto alumnos como académicos, externaron su descontento por esta decisión que, claro, les incomodaba.

Y se manifestaron. Las razones que expusieron mediante un pliego petitorio fundamentan cuestiones razonables de traslados, falta de seguridad, transporte, falta de servicios, entre algunos otros.

La oferta educativa del ITQ es amplia y por esa misma razón obedece su crecimiento al Campus Norte.
En el plantel del Cerro de las Campanas, se ofrecen las carreras de Ingeniería Eléctrica, Ingeniería Electrónica, Ingeniería en Gestión Empresarial, Ingeniería Industrial, Ingeniería en Logística, Ingeniería en Materiales, Ingeniería Mecánica e Ingeniería en Sistemas Computacionales.

En tanto y en el nuevo Campus Norte, están ya las carreras de Arquitectura y de Ingeniería Mecatrónica.
A ellos se agregaría, según esta disposición, la carrera en Gestión Empresarial.

Y es que tanto al grupo de alumnos inconformes, se suma en justa defensa a sus intereses, el sindicato de maestros.

Y a partir de marzo se comienza a tocar esta situación, que incomoda tanto a alumnos como a docentes.
Por lo pronto –y en eso se está de acuerdo– es que los alumnos de nuevo ingreso, qué harán en este septiembre, si inician allá sus clases.

Para algunos maestros inconformes se les han dado algunas horas de clases, mayor, al que tienen en el Cerro de las Campanas.

La disposición del director del ITQ, Máximo Pliego Díaz ha sido de total colaboración para las partes, en un tema que también ha servido como mediador la Secretaría de Educación Pública del gobierno del estado. Recordemos que aquí las plazas –maestros, personal administrativo y de servicio– son federales.

La presión entre las partes ha disminuido –por esta disposición entre las partes– hasta en un 70 por ciento con los alumnos, porque los que ya están en los semestres superiores, permanecerán en el plantel del Cerro de las Campanas en su generalidad y hasta terminar la carrera.

Y es que las propuestas se han ido aceptando en gran parte y los espacios de diálogo continúan abiertos.
La negociación con el sindicato se ha venido paliando con el otorgamiento de plazas, aquellas que son posibles, pero también en respuesta al crecimiento de la población estudiantil.

Así, se tiene confianza en que, en esta misma semana, las partes se arreglen.

El punto de inseguridad se vino a atemperar porque la coincidencia por el desalojo del predio “Las Peñitas” permitirá contar con la presencia de elementos de Seguridad Pública, tanto del estado como del municipio, que están resguardando este predio y en forma aleatoria, toda la zona, tanto de la colonia Villas de Santiago, como la de la calle Santiago Zacatlán, donde se ubica el Campus Norte del ITQ.

En este mes de agosto y desde luego antes del inicio del nuevo ciclo escolar, se espera que este justo reclamo tanto de alumnos como de docentes, quede solucionado en forma total.

Este también es el precio del crecimiento en la demanda estudiantil.

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